Jacko es el bueno para el PRD.
*Por estrategia y bajo la premisa de sacar el candidato “menos peor”, se abre la posibilidad para que un externo ocupe formalmente la candidatura.
Por: Ernesto Caballero
Hace casi tres años, se vivía en el Partido Revolucionario Institucional (PRI) una situación parecida a la que hoy vive el Partido de la Revolución Democrática (PRD) para poder seleccionar el candidato idóneo para contender por la alcaldía de Acapulco.
Vale la pena recordar, que en aquel entonces los nombres que figuraban para ser candidatos del PRI a la gubernatura de Guerrero eran Héctor Apreza, Manuel Añorve, Sofío Ramírez y Héctor Astudillo.
La enmienda de aquel entonces era sacar al mejor candidato, o en su defecto el menos peor.
Corría el año 2015 y todavía el PRI no tenía candidato. Y la disputa de los grupos al interior del partido se vivía mucha incertidumbre.
Se decía que de Apreza Patrón, no podía tener un gran espectro de popularidad porque no había figurado en relación a sus distintos puestos y encomiendas.
Hablar de Sofío Ramírez implicaba aceptar a un “Chapulín político” que primero había sido priísta y luego había sido apoyado por su padrino Ángel Aguirre Rivero en el PRD, y con ello aceptar que el candidato del PRI le diera juego político al dueño de la actual corriente perredista Izquierda Progresista Guerrerense (IPG).
El otro era Manuel Añorve Baños, cuyo desgaste de la Presidencia Municipal cuando gobernó a Acapulco, resultó bastante dañino. Sus enemigos políticos sentenciaron que había saqueado las arcas del Ayuntamiento y que incluso había habido desvío de recursos millonarios. Eso le impidió ser el mejor candidato.
Finalmente quedó como candidato Héctor Astudillo Flores, había gobernado Chilpancingo y la gente estaba contenta con lo que había hecho. La había intentado ya cuando compitió contra Zeferino Torreblanca y éste le ganó limpiamente en las urnas; él en su momento lo aceptó. Sin embargo, le sirvió para acuerparse y generar la confianza de muchos entre ellos, la cúpula nacional del PRI, en la que sin duda era comandada por René Juárez Cisneros para el caso Guerrero. Ahora él es gobernador.
Los tiempos electorales cambian sin duda, sin embargo, las condiciones a veces se afianzan, y es que esta bajo esa directriz, sacar al candidato menos peor es la que ha marcado la selección cupular en distintos partidos y coaliciones.
Tal es el caso en el PRD de Guerrero, en donde habría que recordar que las desbandadas y las afiliaciones a otros partidos son normales en tiempos electorales; luego entonces no espanta a nadie que la Coalición de Organizaciones Democráticas Urbanas y Campesinas (CODUC) se haya salido de las filas del partido del sol Azteca; al fin que ellos sienten que les hicieron un favor, pues para el caso de Acapulco y Zihuatanejo se deshicieron de un problema. Ilich Lozano y Maricarmen Cabrera respectivamente quedaron fuera de la contienda al renunciar al PRD y apoyar el proyecto de nación de André Manuel López Obrador.
Por otra parte, otro de los aspirantes que carga consigo una dura loza que le hace sombra es David Jiménez Rumbo, quien ha sido ligado a grupos criminales, incluso fue reprochado durante la precampaña de traer armas de alto poder de uso exclusivo del ejército. A tiempo respondió con permisos.
En tiempos de precampaña se dio el rumor de que la cúpula perredista en el estado, había sido vendida al mejor postor, es decir al PRI, y haber infiltrado a uno de sus correligionarios en el afán de dividir al partido y quedar como candidato del PRD.
La tarea sonaba algo descabellada, sin embargo, si era cierta o no, tras la operación de Julián López -alfil de Aguirre Rivero- y el Dr. Enrique Caballero Peraza -ex panista- el médico Marco Antonio Terán Porcayo repuntó al menos en el círculo mediático; y como no olvidarlo, si despertó a medio Acapulco toda la noche para que un “call center” levantara su propia encuesta para saber de su posicionamiento. Se decía que él era el indicado para ocupar la candidatura en el Partido del Sol Azteca.
Luego vino la foto de Víctor Aguirre con el candidato formal de Movimiento ciudadano, Ricardo Mejía Berdeja. Obvio que la toma sólo era para ser merecedora de opinión pública, nada que realmente marcara una intención; sin embargo, sí el aviso de que Luis Walton no estaba a gusto con la idea, de que un aspirante con presuntas ligas criminales compita por la coalición “Por México al Frente” y deje de lado a su propio candidato.
De Ramón Almonte Borja y Francisco Torres es difícil crearse una idea de que abanderen al Partido del Sol Azteca con tan poca popularidad y arraigo dentro del partido, serían los menos indicados, aunque los dos son militantes formalmente.
Ahora, bajo la premisa que vivió el PRI para escoger a su “mejor candidato”, cuando competía por la actual gubernatura, y bajo la estrategia de estrangular a los otros dos partidos de la coalición “Por Guerrero el Frente” en cuanto a tiempos y así, impedirles cualquier desbandada y acuerdos externos con otros partidos; se abre la posibilidad para que un externo ocupa formalmente la candidatura.
Y es así como Joaquín Badillo Escamilla, mejor conocido como “Jacko Badillo” sería la opción perredista que sacuda todas las malas intenciones de las corrientes al interior del PRD, y unificar los esfuerzos encabezados por el empresario empoderado en el puerto. Quien abiertamente, aseguró al inicio de la precampaña, que esta ocasión buscaría le estructura fuerte de un partido para poder lograr ser Presidente Municipal. Por ello recurrir al PRD
Lo anterior debido a que ya fue candidato a la presidencia municipal, pero por el Partido Verde Ecologista de México (PVEM), que por cierto le restó votos al PRI en la anterior elección, para salir derrotado finalmente por el PRD y PT que en el 2011 iban en coalición.
Badillo Escamilla, tiene por delante una ventaja, para el Laboratorio de Opinión Público (LABOP), en su encuesta era él el segundo mejor posicionado, tan solo después de Jiménez Rumbo.
Y la otra lectura es que el diputado Ernesto González, coordinador de la precampaña de Jiménez Rumbo, regresó hoy a ocupar su curul en el Congreso Local, razón demás para sentir a Jacko Badillo, cerca de la candidatura del PRD, y por casi pase automático la candidatura del Frente Por Guerrero.
El Candidato del Gobierno Municipal
Por si fuera poco, la versión toma fuerza cuando los funcionarios cercanos al actual Presidente Municipal, Evodio Velázquez Aguirre, dan cuenta de que el munícipe ha llevado a la mesa de las negociaciones de la candidatura el nombre del empresario Jacko Badillo por delante.
Y es que Velázquez Aguirre, ha dispuesto realizar formalmente una campaña a nivel gobierno, que consiste en acuerparse y tomar la fuerza el municipio para seguir en la batalla al interior del partido contra todas las corrientes.
Sólo basta decir que son muchos los problemas en los acuerdos, tan es así, que el día de ayer el ex Gobernador, Ángel Aguirre Rivero, amenazó con retirarse de dicha mesa ante la falta de acuerdos por parte de las distintas corrientes y su dirigencia.
Luego entonces, el primer munícipe del puerto, ha tomado la decisión de llevar a Badillo Escamilla como el abanderado que arrope a Nueva Mayoría y que dé pie, a tener formalmente un candidato en el Partido de la Revolución Democrática.
La estrategia sigue firme y clara en el partido amarillo, aguantar hasta donde se pueda para evitar la desbandada sea cual sea el candidato, y sacar entro de sus candidatos internos y externos al mejor, es decir al menos peor. El tiempo lo dirá.